Intelectualoides.
Caminando por la vida sin nada más en mi cabeza que una pregunta frecuente un
lunes por la mañana ¿Estará mi esmalte de uñas demasiado demacrado? Porque si
es rojo se nota más. Pucha, que lata tener que hacerse las uñas de nuevo.
Mi distraída mente vagaba por ahí cuando
veo aquel ejemplar negro con tonos amarillos, mientras que aquel peculiar viejecito
me sonreía desde la portada. Desearía que fuera mi quinto abuelo. La verdad es que tenía el mismo ejemplar en
casa, pero ¿Qué va? La vida está llena de coincidencias.
Sigo en mi ruta, negro amarillo, camino hacia adelante, viejecito, sigo y sigo
quinto abuelo, estaba en todos lados.
Y todo esto no es para criticar a
Jodorowsky , que en lo personal me gusta, pero m hizo pensar…
¿QUÉ ONDA
INTELECTUALOIDES? ¿Se organizan? ¿Tertulias casuales a tomar té con meñique
levantado y discusiones políticas? Claro, como tienen el alma tan encendida por
los conflictos sociales y tanto que disfrutan presionar el click en su
ciberactivismo diario.
Miren, todo bien con ustedes cuando eran grupitos cerrados
en los carretes y nos miraban con desdén o a veces disfrutaban conversar algún
tema con nosotros, puesto que ninguno era de los más popu del barrio, pero
últimamente ese deje de superioridad implícito en ustedes se está volviendo
evidente.
Dentro de los intelectualoídes tenemos de todo, y muchos pueden ser además hippies,
feministas, ateos, hipsters y un sinfín más de criaturas. Pero en general, me
gustaría mencionar las características más comunes en intelectualoides para que
usted pueda reconocer, OJO que no son excluyentes.
La Conciencia Social: Oh sí, ellos, los preocupados de su
país, del mundo, del medio ambiente. Como si cooperando un poquito se fueran a
comprar el cielo. Sufren mientras comparten sus fotografías de mujeres y de
niñitos pobres llorando, fotos de la
marcha de la semana, de banderas ardiendo, destrucción, violencia y demases
sabiendo que apenas compartan su material intelectual tendrán mínimo “10 me
gusta” de sus otros amigos intelectuales que hacen su buena acción diaria al
igual que ellos. Es que no somos capaces de verlo como ellos. Escudados tras
frases tan clichés provenientes de la revolución francesa. Refugian en Rousseau
sus argumentos y críticas hacia esta sociedad cruel. Le restriegan al mundo
cuan preocupados están por las situaciones y sapen exactamente como
solucionarlo. Critican, critican y critican. Pero esa acción buena del día
acompañada de un estilo de vida poco sencillo y un tanto siútico que llevan, no
te asegura el cielo, ni tampoco te asegura ser buena persona. Pero igual yo no
lo comprendo, porque no estoy en el círculo.
No ven televisión:
“Apaga la tele, prende la mente” “La televisión miente”
Seriously? ¿Cuántas veces vi esto por ahí? Que la tele
miente, te distrae de lo que está pasando, que fu, ni que fa. Ya, si igual está bien la tele en general es una mierda y no hay mucho contenido pero ¿No será como musho ya? Así que, leéme bien
querid@: a nadie le gusta que le digan
qué hacer. Apuesto que ni Hesse lo acepto, ni Kafka o Nietszche, así que basta,
es suficiente. Así no construyen NADA, sólo molestan y afirman su egocentrismo,
sintiendo que ustedes y nadie más que ustedes están en lo correcto. Que todos
los demás matamos lentamente nuestras neuronas porque gozamos la vida a través
de placeres intrascendentes. Además mis queridos, hay libros igual de estúpidos
que nuestros horrorosos programas
televisivos.
El computador y el blog:
Ya que cínica, si igual tengo blog, pero no me “esfuerzo por ser geek”. O sea,
vi big bang theory pero mi anhelo no era precisamente ser como Sheldon, el loco
era chistoso pero ¿Qué onda esa explosión de cultura geek?
De todas formas es a través de sus computadores que descargan su música rara y
se leen entre ellos felicitándose por su poesía, por sus artículo que critican
duramente algo (cualquier cosa, da igual) y se regocijan con el material
expuesto en el primer punto de esto. Van
al café con su computador, su iphone, su macbook, su kindle y obviamente status
update de twitter #todoelrato, si la prensa miente, ahora ellos son la prensa y
la tecnología está de su lado.
De música y las
artes:
Simplemente no pueden disfrutar de cualquier pieza de basura que se haga
llamar arte. Ellos estudian el arte, lo examinan, lo critican sin miedo de ser
crueles. Por algo hay parámetros. Suelen ser muy estrictos a la hora de
criticar obras, puesto que tienen conocimiento de causa respecto a todo, y esto
no excluye al arte. Así que olvídate que escuchen música o cine sin contenido ¿Para qué? No vale la
pena, eso es solo para nosotros seres no interesantes.
Un plus...
El siútico. Más que una característica este es un tipo de
intelectualoide, que puede tener todas las anteriores. El ejemplar clásico,
aquel que no nace como intelectual, pero ve que está bien de moda andar con los
lentes tipo salvador allende, así que corre a la librería más cercana a comprar
el último tango de éste ex presidente. Es aquel que tiene frases interesantes
en Facebook, que se construyó el hábito de leer
porque no lee porque sí, es un gusto
completamente adquirido por tardes de “tortura” intelectual, para luego
juntarse con su grupo de intelectuales en las tertulias a conversar de sus
obras favoritas con pura gente linda como ustedes. Pero OJO, sabemos que apenas
el manto de la noche cae sobre la ciudad, y tu madre se fue a comprar pancito
pa la once, TÚ escondido en tu manta favorita enciendes la televisión y disfrutas
esos minutitos de SQP o de Primer Plano que tanto te has prohibido.
Pero para finalizar quiero decir ¿Saben qué intelectuales?
Sí, son mejores que yo. Sí, saben MUCHO más que yo. Tienen buen gusto, son más culturales y son MEJORES
personas que yo. Pero igual son amargados y cada vez que me molesten por estar
viendo Primer Plano háganme el favor de tomar su ejemplar más cercano de Franz
Kafka e introducirlo por su cavidad anal.
FDLG
El siútico. Más que una característica este es un tipo de
intelectualoide, que puede tener todas las anteriores. El ejemplar clásico,
aquel que no nace como intelectual, pero ve que está bien de moda andar con los
lentes tipo salvador allende, así que corre a la librería más cercana a comprar
el último tango de éste ex presidente. Es aquel que tiene frases interesantes
en Facebook, que se construyó el hábito de leer porque no lee porque sí, es un gusto
completamente adquirido por tardes de “tortura” intelectual, para luego
juntarse con su grupo de intelectuales en las tertulias a conversar de sus
obras favoritas con pura gente linda como ustedes. Pero OJO, sabemos que apenas
el manto de la noche cae sobre la ciudad, y tu madre se fue a comprar pancito
pa la once, TÚ escondido en tu manta favorita enciendes la televisión y disfrutas
esos minutitos de SQP o de Primer Plano que tanto te has prohibido.
